Así que acabas de llegar a Barcelona y estás muerto de hambre. Es hora de buscar algo de comida tradicional, pero no quieres la omnipresente paella y sangría. ¿Qué hacer? Afortunadamente hay una abundancia de deliciosos platos en la cocina tradicional catalana y numerosos restaurantes en Barcelona donde probarlos. Así que, ¿estás preparado para ir contra corriente y convertirte en un hípster gastronómico? ¿Sí? ¡Pues que empiece la degustación!
Calçotada
Al igual que los Transformers, hay más en esta humilde hortaliza de lo que aparenta. A simple vista parece un puerro sobredimensionado, y como tal, condenado a compartir espacio con lechuga y tomate en una ensaladera. Pero el calçot es de hecho un dulce primo de la cebolla que tiene que ser asado a fuego (es necesaria la llama, brasas no serán suficientes) hasta que las capas externas estén quemadas. Después se agrupan en haces de unos 25 calçots y se envuelven en papel de periódico para que terminen de cocinarse con el calor residual. Antes de comerlos, es necesario pelar la capa quemada, y mojarlos en el romesco (una salsa hecha a base de piñones y pimiento rojo). Algunos restaurantes proveen baberos king-size , puesto que tendrás que elevar el calçot empapado de salsa romesco sobre tu cabeza y comerlo cual tiburón zampándose un surfista si quieres parecer un auténtico local. Los calçots son el preámbulo de una barbacoa u otro plato cárnico, como por ejemplo nuestro siguiente elemento.
– Restaurante Carmen – Carrer de Valladolid, 44 (+34 933 30 36 88)
– El Jardí de l’Àpat – Albert Llanas, 2 (+34 932 85 77 50)
Butifarras
Son un tipo de salchicha tradicional hecha con escasa o nula grasa. Hay dos variedades principales; una que está cruda y necesita ser cocinada, la otra que puede ser cortada en lonchas para hacer un bocadillo. Pero lo que hace grande a la butifarra son sus ilimitadas posibilidades: ¿la quieres rellena de setas? Lo tienes; ¿te sientes intrépido? Prueba una rellena de manzana y curry. Puede que parezca fast-food, pero hey, esto es España y aquí no hacemos nada de prisa.
– Butikfarra – Passatge de París, 209 (936 76 36 98)
– La Guingueta de la Barceloneta – Playa de San Sebastián; Barceloneta (+34 628 273 578)
Bombas
Hay muchas versiones referentes al origen de esta tapa formada por carne picada rodeada de puré de patata y cubierta de salsa picante. Lo que está claro es que hoy en día los mejores y más antiguos lugares donde probarlas están todos ubicados en el antiguo barrio de pescadores de la Barceloneta. Algunos de ellos incluso ofrecen diferentes niveles de “picantez”, desde las que llevan alioli (una mayonesa con ajo) a las “explosivas”, solo recomendadas para los más valientes. Pero no te equivoques, a pesar de ser consideradas tapas, algunas pueden llenar hasta los estómagos más grandes!
– Cova Fumada – Calle Baluard, 56 (+34 932214061)
– L’Òstia – Plaça de la Barceloneta, 1 (+34 932 21 47 58)
Gambas de Palamós
Si el marisco te vuelve loco, por qué no dirigirte a uno de los múltiples mercados de barrio y conseguir algunas gambas de Palamós frescas. Estos crustáceos son los VIP de las pescaderías, y como tal están muy buscadas. Lo ideal es sencillamente pasarlas por la plancha y aderezarlas con sal, ajo y perejil, para dejar que sea el sabor de la propia gamba el que salga a relucir. El verano es la mejor temporada para degustarlas, y no te arrepentirás de probar esta delicatessen, especialmente si las maridas con un vino blanco del Penedés.
-Mercat de Santa Caterina
-Mercat de Sant Josep (La Boqueria)
Cargols
Para aquellos aventureros de mente abierta, siempre está la opción de probar cosas nuevas. Los caracoles son un plato muy tradicional en Cataluña. ¡Sí! ¡Has leído bien! Caracoles. Estos pequeños animales son tan famosos que incluso tienen un festival culinario dedicado íntegramente a ellos: L’Aplec del Cargol, que significa “la reunión de los caracoles”. Si te encuentras por Cataluña a finales de mayo, sería interesante visitar Lleida, a dos horas en coche de Barcelona, donde se celebra el festival.
¡No te olvides del pan para mojar!
– Racó d’en Pat – Travessera de les Corts, 298 (+34 932 26 02 96)
– Los Caracoles – Carrer dels Escudellers, 14 (+34 933 01 20 41)
Crema catalana
Todas las cocinas del mundo tienen dulces, y la catalana no es una excepción. Crema Catalana, nuestro postre más popular, está hecho con huevos, leche, canela y limón, y se sirve en pequeñas cazuelas de barro cubiertas de una fina capa crujiente de azúcar quemado. Una pequeña anécdota: las primeras referencias a la “Crème Brulee” francesa se encuentran en el libro “Nouveau cuisinier royal et bourgeois du cuisinier François Massialot” en 1691, mientras que la crema catalana ya es mencionada en “Llibre de Sent Soví” de 1324. Y ahí queda eso.
¡NO es crème brulee!
– Granja Dulcinea – C/ Petritxol, 2 (+34 933 02 68 24)
– Julivert Meu – C/ Bonsuccés, 7 (+34 933 18 03 43)